martes, 5 de enero de 2016

Cupcakes de yogur y frambuesa

Que de qué puedo estar orgullosa en la vida?

Pues gracias a Dios, de todo!. No me puedo quejar de nada. Doy gracias por los padres, hermanos, familia, marido e hijos que tengo. Por el trabajo. Por todos los amigos que tengo, que también forman parte de mi familia.

Por ser como soy. Aunque mi hijos digan que soy una pesada, pues también. Supongo que como todas las madres.

Por ser tonta de tan buena persona que soy? Pues también.

De recibir golpes en la vida por ser de tan buena fe? Pues también.

Soy una persona muy positiva, que siempre saco el lado positivo de las cosas malas.

Pero también hay algo que me duele en el alma y de la que nunca me recuperaré. que mi madre tuviera que vivir desde los 60 años prácticamente con una brutal enfermedad que la íba matando poquito a poco y haberla perdido tan pronto y la segunda, haber perdido a mi hermano pequeño con tan sólo 37 años. Pero, como se suele decir, hay que superarlo todo y mirar hacia adelante.

Bueno, a lo que iba. Me siento también muy orgullosa de ver que Jan, mi sobrino, es una lumbrera entre fuegos y un repostero de primera. Si, sí, siguiendo los pasos de la tieta, como dice mi cuñada. Y si no, mirad, los cupcakes de yogur y frambuesa que preparó estas Navidades. Os prometo, que los preparó él. Yo sólo preparé los ingredientes y encendí el horno.



Orgulloso de sus cupcakes, que estaban buenísimos y él, guapísimo (y no es amor de tieta).

Mirad:
 




Ah!, también preparamos un pastel de yogur y frambuesa, pero nos lo comimos y no llegó a tiempo de la sesión fotográfica. Lo siento.










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